Esta pandemia está causando que muchos niños sean adictos a las pantallas. Pasan tiempo conectados porque tienen que estudiar y hacer sus deberes, pero también lo usan como su fuente principal de entretenimiento. Si bien por ahora esto no parece un problema, cuando la vida vuelva la normalidad, esta adicción a las pantallas será un grave problema.
Este es el tiempo de prevenir, y para ello puedes tomar medidas que te permitan regular el tiempo que tus hijos pasan frente a los aparatos electrónicos; de modo que puedan ponerse un límite y no ser controlados por sus impulsos.
Qué hacer para que tus hijos no sean adictos a las pantallas
Randy Kulman, Ph.D., psicólogo clínico infantil, relata que los niños y adolescentes que muestran adicción a las pantallas tienen los mismos síntomas emocionales que cualquier otra persona adicta. Esto es preocupante porque a una temprana edad, los niños y adolescentes no tienen experiencia regulando sus tiempos; si a un adulto le es difícil despegarse de su celular, ¡cuánto más a un niño!
Según Kulman, hay algunas cosas que los padres pueden poner en práctica en sus hogares para cuidar el bienestar de sus hijos y su relación con la tecnología.
1. Da el ejemplo
Los niños observan y copian el comportamiento que ven en los adultos que los rodean. Si en un hogar se reemplaza la interacción física por la comunicación en línea, entonces es de esperar que los niños hagan lo mismo. Todo comienza con el ejemplo de dejar los aparatos electrónicos de lado y practicar otras actividades.
2. Designa horarios
En este sentido, Kulman aconseja tres puntos específicos:
—Elegir juegos en línea que tengan un final claro o que se puedan terminar de una sola vez.
—Ponerles un temporizador que regule su tiempo en línea.
—Asignar un tiempo determinado para revisar las redes sociales.
3. Apaga los aparatos electrónicos y el WiFi de noche
Una recomendación frecuente de los expertos en salud es no ver ningún tipo de pantalla antes de dormir porque disminuye la energía del día siguiente; además, perturba los patrones de sueño y, como consecuencia, la habilidad del cerebro de procesar información.
Sin embargo, hay miles de personas que revisan sus pantallas antes de dormir y quitan las horas de sueño por ver videos o revisar sus redes sociales. Por eso es importante que los padres desconecten la conexión a Internet durante la noche y permitan que sus hijos disfruten de sus horas completas de sueño.
4. Haz que otras actividades sean más importantes
Cuando hay una actividad que es más importante que la tecnología, los niños no le prestan atención a sus aparatos electrónicos. Por este motivo, Kulman recomienda que para que tus hijos no sean adictos a las pantallas, debes promover otras actividades que no impliquen el uso de la tecnología; esto significa no hacer compras en juegos en línea, sino fomentar otros pasatiempos.
Por ejemplo, algunos de estos pueden ser los deportes, la música, la repostería, las manualidades, etc.
Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.